Conócete a ti mismo y conocerás el universo y a los dioses

Templo de Apolo

En 2004 aparecí por Vitaliza. Llevaba 4 años luchando contra una agorafobia que me había provocado fuertes ataques de pánico. Tenía una vida funcional, pero con soporte farmacológico para algunas actividades. Tras una vida de continuo éxito y promociones profesionales, en el año 2000, justo al cumplir los 40 años, la vida me avisó de que algo no funcionaba bien.

Llegué con escepticismo. Llevaba 4 años con más o menos medicación y había pasado por 4 psicólogos. Era el último intento antes de aceptar que la medicación iba a ser mi solución para el resto de mi vida.

Javier Elcarte enseguida vio cómo operaba mi mente y me dijo, con absoluta seguridad, que tenía arreglo, lo puso en términos casi mecánicos, porque sabía que así le creería, y con neurofeedback y sus consejos, en pocos meses, me libere de la fobia y de la medicación. Y así transcurrieron muchos años.

Pero allá por 2013 volvía a sentir más estrés, más ansiedad, aunque sin llegar a los episodios de antaño. Y vi claramente que había algo insano en mi forma de vivir, de buscar continuamente el éxito, el reconocimiento, en la autoexigencia sin límites, en la tensión que generaba a mi alrededor. Y volví, pero no en busca de terapia, que no la necesitaba, si no en busca de la sabiduría de Javier para vivir la vida plenamente, funcionalmente, con eficacia personal y profesional, pero de otro modo.

Javier me introdujo en el mindfulness. Y empecé a practicar y practicar. Y me permitió descubrir toda una gran parte de mí que desconocía. Me permitió salir del blanco y negro de la mente y descubrir el mundo de infinitos colores de las emociones. Descubrí la maravilla de poder vivir el presente sin estar siempre viviendo el futuro. Y, sobre todo, me abrió el camino a descubrir a los demás, más allá del juicio y la utilidad. Y todo ello sin perder un ápice de funcionalidad en lo personal y en lo profesional.

Eliminar la patología es un primer paso. Lograr una mente sana y equilibrada es un camino, un proceso. No tiene fin, pero es apasionante.

Javier Valls