Mi Soledad
Mi soledad es un niño.
Uno que te observa con vidrio en los ojos.
Ojos que vinieron para ser mirados, recogidos, sostenidos, acompañados y allá dónde buscaban oasis encontraron árido desierto.
Ojos que esconden en una forma triste, el poso de la rabia hacia quién debió mirar y no lo hizo.
Búsqueda en el vacío, agujas en el torso.
Negación de un arcoiris de emociones para crear una escala de grises cómoda y segura pero cubierta por un manto de pena que forja un carácter.
Rígida armadura que protege y esconde, que borra pero recuerda.
Ahora puedo verte. Ponerme frente a ti y mirarte.
Acompaño tus lágrimas que son las mías y te cojo de la mano.
Eres pequeño pero yo soy grande y puedo sostenerte. Cuenta conmigo. Ahora que te he encontrado, no volveremos a estar solos.