En nuestra salud mental influyen muchas variables, y una de ellas es nuestra alimentación y nuestros hábitos. Durante el confinamiento, muchos han recurrido a la nevera, creyendo así que calmaban su malestar, su ansiedad o su aburrimiento. Pero si nuestro estómago no está bien, si no llevamos a cabo una buena alimentación, junto con deporte, actividades placenteras y sobre todo, si no pasamos tiempo con nuestros seres queridos, intercambiando afecto y cariño, nuestro salud mental corre peligro.
A continuación, podéis leer una reflexión acerca de la importancia de nuestra salud digestiva para nuestra salud mental:
https://elpais.com/elpais/2018/05/23/eps/1527069175_318107.html